Guadalajara, Jalisco, 13 de septiembre de 2024.- Las tenistas Caroline García y Olivia Gadecki experimentaron otra versión de su deporte profesional al lado de Javier Silvia, jugador ciego que desde hace 8 años se dedica a dar conferencias y promover en grandes eventos el deporte adaptado Blind Tennis (Tenis para Ciegos).

Fue en la cancha 5 del Centro Panamericano de Tenis donde se lleva a cabo el Guadalajara Open Akron cuando Garcia, quien se encontraba entrenando en la cancha de al lado, sintió curiosidad por el sonido del cascabel que tiene la pelota de esponja y se acercó a Javier.

Enseguida tomó su raqueta y comenzó a pelotear con el atleta que hace 18 años fue afectado por un virus que entró a su cerebro y “cortó un cablecito que me dejó ciego”.

Tras Garcia, fue la australiana Olivia Gadecki quien tomó el reto de poner a prueba sus sentidos y primero peloteó sin antifaz y después se colocó uno, pero en ambas condiciones no aprobó la prueba, aunque sí se divirtió mucho.

“Éste es un gran espacio para difundir este deporte (Blind Tennis) y darlo a  conocer no solo a México sino el resto del mundo y poner el nombre de nuestro país en alto.  Es un deporte de inclusión, no necesito tener a una persona ciega para invitarla a jugar y que desarrolle sus sentidos (como ocurrió con Caroline y Olivia), claro que a nivel competencia sí se juega entre dos personas con discapacidad visual”, señaló Silva, quien nació en la ciudad de México y tiene 54 años de edad.

Otra sorpresa que se suscitó en la pista fue la visita del comentarista José Luis Clerc, quien se conmovió hasta las lágrimas tras conocer la labor de Javier Silva.

Batata y Silva conversaron por algunos minutos y se tomaron la foto del recuerdo.

La participación de Silva al GDL Open se ha vuelto una tradición, ya que es invitado por la organización del torneo, así como por la Asociación de Tenis de Jalisco.

El tenista viaja acompañado de su esposa Alejandra Arreola y su perrita guía de nombre Camila.

Al término de la exhibición, Silva alentó a las personas con discapacidad visual y a las que no también a perseguir sus sueños y les aconsejó tener confianza en sí mismos.

“No hay nada que esté fuera de tus posibilidades, la mejor manera de fracasar es quedar bien con la gente. Aquí se trata de hacer lo que te nazca y apasione. Así he resuelto mi vida, yendo hacia arriba, no hacia adelante”, concluyó.